Peregrinar es estar en camino, camino al cielo, por eso siempre que hay oportunidad no desaprovecho la ocasión de peregrinar puesto que me pone en movimiento y me recuerda que la vida es un camino al cielo, un camino que está lleno de personas, incomodidades, molestias, alegrias, imprevistos pero que nunca nos deben apartar de Cristo.
Los jóvenes que partimos casi en su totalidad del Camino Neocatecumenal, maduran su fe en un itinerario de formación cristiana para jóvenes y adultos donde redescubren el bautismo y la esencia de ser cristiano.
Eramos un grupo, de diversas parroquias Santiago, La Paloma, Begoña, San Jose, etc... de muchas culturas y tambien de diferentes edades pero todos llevavamos la misma ilusión de encontrarnos con Cristo.
Además en la Javierada de este año era presidida por la cruz de la Jornada Mundial de la Juventud, que proximamente se celebrará en Madrid (Agosto 2011). Un incentivo más, si cabe, para no perder esta oportunidad!!
La primera noche la pasamos en el Centro Neocatecumenal de Pamplona, donde tambien coincidimos con los jóvenes de la Delegacion de Juventud de Madrid (Deleju). Alli con sacos y esterillas nos fuimos a dormi al poco de llegar (sobre la 1.00 de la madrugada).
Ya por la mañana después de rezar laudes partimos para caminar unos 14-16 km con la intención de llegar a Javier para la eucaristia de las 19.00. A mitad de camino paramos a comer en un campo, fuimos cantando cánticos de alabanza a Dios y finalmente rezando el santo rosario.
Llegamos justos para eucaristia y después de esta, un pequeño tiempo para visitar el castillo, tomar un café o lo que apeteciera.
El viaje en general estuvo marcado por la comunión, el buen ambiente y la cercanía de unos con otros y como no también por el frío, las incomodidades.
A pesar de dormir mal, estar cansados, con frío, no supusieron impedimiento alguno para recorrer este camino de salvación y darnos cuenta que la muerte está vencida, que el cielo está abierto que Cristo ciertamente nos ama!!
Volvimos a dormir al CNC de Pamplona dond,e esta vez algunas(sobre todo) se pudieron duchar y otros tuvieron que hacer la "ducha del gato".
Compatimos la cena, impresiones y nos divertimos con algunos juegos (Kia, Hondo!), cartas, Party, etc.
Cuando el cansancio arreciaba, nos fuimos a dormir, para visitar al día siguiente a unas monjas concepcionistas en logroño las cuales nos acogieron con galletas, refresco y sobre todo con su vida.
Grandes experiencias, por la edad (una llevaba 50 años allí) , otras por su vida, en cualquier caso para mi un milagro absoluto que alguien se entregue por completo a Cristo.
Paramos a comer en Burgos, que morcillas tan ricas!! Y ya de regreso dimos algunas experiencias y quedamos en volver a vernos, ya que después de todo hemos conocido a grandes personas y grandes historias!!
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